miércoles, 29 de enero de 2014

De profesión: Intrusos...



Hoy os voy a hablar de los intrusos.

Este género de personas son, para mi, aquellos y aquellas que sin saber cómo, dónde ni por qué de repente ponen un negocio "de moda", normalmente sin tener ni puta idea y te venden que llevan años en ese mundillo, que son los que más saben y alardean de dar el mejor servicio a los precios más competitivos.


Si por desgracia eres como yo, que no tengo ni puta idea de casi nada y encima tienes poca pasta o ninguna te pueden engañar. El problema real es para aquella gente que lleva años intentando sacar su negocio adelante, secundándolo con años y años de experiencia, que se dejan la piel por ofrecer el mejor servicio, atendiendo a las necesidades de sus clientes y a los cambios que van surgiendo con el paso del tiempo.

Estos profesionales tienen que aguantar que los intrusos se metan en su terreno, les quiten clientela, poca por que como os digo la peña puede picar una vez pero en seguida se dan cuenta de que a veces pagar menos no es la mejor opción. Yo creo que lo peor para los que hacen las cosas bien es la mala publicidad que dan este tipo de gente al gremio y a la zona donde estás desarrollando tu actividad ya que por desgracia lo bueno se olvida y a lo malo se le da todo el bombo del mundo y normalmente tendiendo a generalizar...

Todo este rollo que os estoy soltando pasa en muchos tipos de negocio pero concretamente el que me revienta es uno que está en auge de un tiempo acá en Asturias, en otros sitios no lo se, me refiero a las escuelas de surf.

Las escuelas de surf en Asturias últimamente parecen setas en montes de Euskal Herria, das una patada y salen doscientas...en la zona que resido hay más escuelas que surfers...para una playa sóla (bueno en realidad dos) hay alrededor de 7 escuelas de surf...


Si estáis interesad@s en practicar este deporte os aconsejaría que os informaseis muy bien antes de tomar una decisión. Daos cuenta que el surf se desarrolla en el mar, parece obvio pero mucha peña no se da cuenta de que el mar es muy bonito pero muy peligroso y en estos temas es muchísimo más importante la seguridad que ahorrarte unos euros por coger uno más barato. Como en todas las actividades hay precios como hostias pero cuando veas que hay muchísima diferencia, sospecha.

Las clases de surf requieren unas medidas de seguridad que parten de la base que un monitor no puede controlar como debe a cierto número de personas que no tienen ni puta idea y pueden quedar a merced de las olas.

Si entramos en más detalles podéis flipar de los tugurios y la mierda de servicio que dan en algunos sitios. Y lo más cojonudo es que de cara a la galería (fotográfica, ya que les mola mucho subir fotitas a las redes sociales de sus supuestas magníficas instalaciones y servicios) lo que ofrecen es la hostia...

Lo dicho, informaos bien, escuchad las opiniones de los que llevan toda la vida en ello y alejaos de estos "pros" que vacilan de haber recorrido las playas de medio mundo, de haber surfeado las olas más acojonantes del planeta y que realmente lo más cerca que han estado del mar y una tabla ha sido caminando por el paseo de "SU" playa.

Ejemplos de todo lo contrario a lo que os he hablado en esta entrada, entre otras, son:







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